Arraco Tapia, Rafael
Ficha
Apellidos y Nombre
Arraco Tapia, Rafael
Fecha de nacimiento
octubre 24, 1896
Lugar de nacimiento
Zaragoza
Fecha de fallecimiento
1954
Profesión
Mecánico telegrafista y electricista Ver todo fichas con este valor
Organizaciones de militancia
UGT
PSOE
PSOE
Cargos desarrollados en UGT
Militante de la organización clandestina en Madrid
Nº causa/s
Sumarios 647/54, 12.545 y 124.617
Fuentes documentales del proceso
Archivo General e Histórico de la Defensa
Observaciones
En julio de 1918 comenzó a trabajar en el Ministerio de Comunicaciones en Madrid. Miembro de la UGT desde 1933. Desde 1936 fue vocal del Sindicato Nacional de Telégrafos de la UGT siendo secretario de la Sección de Mecánicos. Durante la guerra civil formó parte del Comité de Telégrafos y del Servicio de Información Militar siendo destinado en septiembre de 1938 ala Secretaria de Armamento de la Delegación Centro. Ingresó en la AS de Madrid en abril de 1937. Finalizada la guerra fue detenido permaneciendo dos meses en prisión. Estuvo dos años desterrado en Valencia. Al regresar a Madrid y ser expulsado del Cuerpo de Telégrafos comenzó a trabajar como electricista en el Teatro de la Comedia. Perteneció a la organización socialista clandestina formando parte desde mediados de 1946 del aparato de propaganda de las Comisiones Ejecutivas del PSOE y la UGT en el interior bajo la responsabilidad política de Emilio Agüero Gozalo. Fue el encargado de almacenar y distribuir la propaganda desde el Teatro de la Comedia. Era miembro además del Grupo Sindical Socialista de Comunicaciones, formando parte de la Comisión Ejecutiva del Sindicato de Telégrafos representando a la Sección de Mecánicos. Fue detenido el 2 de noviembre de 1947 durante la redada que desarticuló la Tercera Comisión Ejecutiva del PSOE y la Comisión Ejecutiva de la UGT en el interior y el aparato de propaganda clandestina instalado por ambas. En Consejo de Guerra celebrado el 29 de enero de 1949 en Ocaña (Toledo) fue condenado a un año de prisión. En marzo de ese mismo año seguía recluido en el penal de Ocaña, donde se encontraba desde principios de diciembre de 1947, a pesar de que por entonces ya había rebasado la pena a que había sido condenado. Falleció en Madrid en 1954.